A. Ricino Eco crecimiento, encrespado, pestañas, cejas, barba

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Descripción

ACEITE DE RICINO ECOLOGICO

El ricino es un arbusto de unas hojas muy llamativas procedente de las regiones tropicales. Sus semillas se prensan en frío para extraer un aceite vegetal excelente para nutrir y reforzar el pelo, las pestañas y las cejas. Este aceite vegetal también tiene numerosas e interesantes propiedades cosméticas y terapéuticas. A pesar de su viscosidad, este aceite se utiliza en sinergia con aceites esenciales, ya que penetra con facilidad en la piel. Nombre en latín: Ricinus communis L. Parte utilizada: semillas.

  • Nutritivo y reconstituyente: este aceite vegetal es ideal para reforzar las pestañas y las cejas, y lograr que el pelo crezca más fuerte, espeso y brillante. También endurece y refuerza las uñas.
 

Para el pelo seco, sin brillo, encrespado y la caída de cabello

El aceite de Ricino es perfecto para preparar tratamientos capilares por dos motivos. El primero es su alta concentración en ácido ricinoleico. Este ácido graso solo se encuentra en esta planta y es el que le otorga su textura viscosa que ayuda a fortalecer y nutrir el cabello, así como a reforzar la fibra capilar. El ácido ricinoleico también destaca por sus propiedades antifúngicas y antibacterianas, que le permiten sanear el cuero cabelludo. ¡Y no hay nada mejor para tener un pelo perfecto que un cuero cabelludo saludable! El segundo motivo es la presencia de la vitamina E en su composición. Esta vitamina es un antioxidante natural que protege el pelo de las agresiones externas, lo repara y estimula su crecimiento. También favorece la microcirculación del cuero cabelludo y estimula el aporte de nutrientes del bulbo piloso.

  • Consejo de aplicación: con el pelo seco y sin nudos, hacer una mascarilla y aplicar la cantidad necesaria. Insistir en las puntas y masajear suavemente el cuero cabelludo. Dejar actuar durante al menos una hora o durante toda la noche y aclarar con champú. El aceite de Ricino es muy viscoso y se puede diluir en otro aceite vegetal en función del tipo de pelo que vaya a tratarse (por ejemplo, en una concentración del 50 %).
  • Aceites esenciales complementarios: en caso de pelo seco, dañado o encrespado, los aceites esenciales de Lavanda o de Ylang-Ylang pueden ser buenos candidatos para combinarlos con el aceite vegetal. Los aceites de Nardo del Himalaya, Jengibre o Pomelo son más eficaces contra la caída de cabello.
  • Otros aceites vegetales adecuados: hay muchos aceites vegetales que nutren el pelo: Argán, Aguacate, Manteca de Karité, Coco o Manteca de Cacao.

Para reforzar las pestañas y las cejas

La acción del ricino en las pestañas y en las cejas se debe a las mismas propiedades que lo hacen tan beneficioso para el pelo. Este aceite aporta nutrientes y estimula los bulbos pilosos, lo que ayuda a reforzar el pelo y acelera su crecimiento. También refuerza las pestañas y las cejas, aumenta su densidad y estimula su crecimiento para rellenar así los posibles huecos.

  • Consejo de aplicación: antes de acostarse, aplicar una gota por pestaña y ceja del aceite de Ricino e con un bastoncillo o un peine para pestañas limpio y seco (¡con cuidado para que no entre en los ojos!).
  • Hidrolatos complementarios: se puede confeccionar un desmaquillante bifásico al añadir hidrolato de Aciano, Rosa de Damasco, Planta del Té o Jara al aceite vegetal de Ricino.
  • Otros aceites vegetales complementarios: el Ricino es un aceite que destaca por su viscosidad. Para desmaquillarse más fácilmente, lo mejor es diluirlo en otro aceite vegetal más fluido (como el de Nuez de Albaricoque, Aguacate o Coco) después de calentarlo con los dedos.

Para las pieles secas y dañadas

Gracias a su alta concentración en ácidos grasos, el aceite de Ricino tiene propiedades emolientes y suavizantes. El ácido ricinoleico es un ácido graso omega-9 que ayuda a reforzar la película hidrolipídica, la barrera natural de la piel. El aceite de Ricino tiene propiedades antiinflamatorias y analgésicas que le ayudan a calmar la irritación que producen las pieles secas o muy secas. También favorece la reparación de la piel y acelera el proceso de cicatrización.

  • Consejo de aplicación: aplicar unas gotas del aceite de Ricino en las zonas secas y dañadas de la piel. Es recomendable diluir al 50 % en otro aceite vegetal.
  • Otros aceites vegetales adecuados: para nutrir la piel seca y dañada, también se pueden utilizar los aceites de Argán, Manteca de Karité, Cáñamo o Sésamo, por poner algunos ejemplos.

Para cuidar de la barba

Al igual que ocurre con el pelo, el aceite de Ricino actúa de dos maneras sobre la barba. En primer lugar, nutre la piel sobre la que crece la barba (que a menudo descuidamos) y, en segundo, suaviza y refuerza el pelo gracias a su acción sobre la queratina. El aceite de Ricino también puede usarse para dar fuerza y brillo al pelo de la barba y estimular su crecimiento para cubrir las zonas donde ralea o, simplemente, para aumentar su densidad.

  • Consejo de aplicación: aplicar unas gotas del aceite en la barba antes de acostarse y masajear la piel para que penetre mejor. Dejar actuar durante toda la noche y aclarar el aceite sobrante a la mañana siguiente. Repetir 3 veces por semana. Se puede diluir el aceite de Ricino en otro aceite vegetal para aplicarlo más fácilmente.
  • Aceites esenciales complementarios: el aceite esencial de Nardo del Himalaya también estimula el crecimiento del pelo.
  • Contraindicaciones: no tomar el sol después de haber aplicado el aceite en la piel.

Usos:

  • Piel
  • Cara
  • Cuerpo
  • Cabello
  • Uñas

Información adicional

Tamaño

125 ml., 15 ml., 200 ml., 500 ml., 60 ml.